jueves, 19 de junio de 2025

El mundo del trabajo a través de las estadísticas

Scott, Joan W. “El mundo del trabajo a través de las estadísticas. La ‘Estadística de la industria en París (1847-1848)’”. En Género e historia, 148-178. México D.F.: FCE, UACM, 2012 [fecha original de la obra: 1986].


I. EL MUNDO DEL TRABAJO A TRAVÉS DE LAS ESTADÍSTICAS. La "Estadística de Ia industria en París (1847-1848)”


Inicio del capítulo

Las encuestas públicas y privadas seguían proliferando entre los años de 1830- 1848 porque tanto los conservadores como los reformadores sociales afines a ellos recogieron pruebas para fundamentar sus respectivas posiciones. Este enfoque se guiaba por las ideas de la Ilustración acerca del poder de la ciencia objetiva.

En cierto sentido, hemos aceptado su valor y hemos perpetuado los términos del debate del siglo XIX según el cual las cifras son, en cierto modo, más puras y menos susceptibles a las influencias subjetivas que otras fuentes de información.

Este procedimiento tiene, al menos, tres resultados: supone posible dividir un problema indivisible o integral, el de la naturaleza de la realidad y su representación; niega los aspectos políticos inherentes a la representación; y simplemente subutiliza las fuentes. 

No objeta su utilidad sino que argumenta en favor de una lectura de los informes estadísticos que problematice y contextualice sus propias categorías y sus conclusiones; en otras palabras, estoy por acabar con la separación existente entre los informes estadísticos y otros tipos de textos históricos.

En su análisis concluye que la Estadística se servía de las estadísticas y de la ciencia para legitimar su propio argumento político. 


I.

La Cámara de Comercio empezó a trabajar en la Estadística de la industria en la segunda mitad de 1848, en una atmósfera cargada de tensión social. Había habido una Revolución en febrero de 1848, en la cual sus líderes lucharon por el establecimiento de una república. 

Los "nuevos bárbaros" eran los obreros parisinos que habían tomado las calles para protestar por el cierre de los talleres nacionales, patrocinados por el gobierno, con el fin de proporcionar ayuda a los desempleados.

Exponerlos a la "realidad" restauraría el sentido perdido de equilibrio. Había que demostrarles a los obreros que su condición no era lamentable, que la industria no había generado necesariamente la pobreza, al contrario, que los esfuerzos personales de los inteligentes y laboriosos habían redundado en el progreso individual y en las mejoras colectivas.

Bajo el velo de la objetividad, la Estadística pretende decir la última palabra en una serie de debates políticos que duraban desde hacía mucho tiempo, los cuales se planteaban como evaluar los efectos del capitalismo industrial en las vidas de los obreros franceses.

El doctor Louis Rene Villerme, de la Academie des Sciences Morales et Politiques (Academia de Ciencias Morales y Políticas), en un estudio de 1840, identificó tres "prácticas perniciosas" como causas del desorden social. Estas eran la mezcla de los sexos en las fábricas, que conducía a la corrupción moral; el largo dia de trabajo de los obreros niños, que destruía su salud; y la práctica de algunos empresarios que consistía en dar avances sobre el salario a sus obreros, a modo de préstamo, lo cual los llevaba a la imprevisión y a la pobreza. La cuestion clave, en la mayoria de estos tratados, consistia en argumentar en pro de la reforma de la Ley de 1841 sobre el trabajo infantil -la filantropia, los bancos de ahorro, la educación, la sanidad doméstica o la legislación protectora- que limitaba a diez el número de horas de trabajo de los niños en las grandes fábricas.

En mayo de 1848, una investigación sobre el trabajo -una demanda radical bajo la Monarquía de Julio- se convirtió en una táctica conservadora para debilitar el prestigio del gobierno y, en consecuencia, negar influencia política a los intereses de los trabajadores

Sus 29 preguntas estaban enfocadas casi exclusivamente hacia las condiciones de trabajo y las vidas de los trabajadores en 1848. No había preguntas sobre las fuentes del capital de los fabricantes, sobre la organización de la producción, las ganancias del oficio o el valor de la actividad comercial. El Comité trabajó despacio en un principio, pero después de Los Días de Junio sus miembros abandonaron la encuesta por completo.

La Estadística presentó un plan de reconstrucción económica y una forma de demostrar a los asustados inversores que la confusión de los meses anteriores fue una aberración, algo no característico de la organización básica ni de las relaciones en la economía parisina. El formato del informe conllevaba un sentido de estabilidad y control. 

El término Industrie denotaba tanto una actividad empresarial como cualquier actividad productiva. En realidad, los autores del informe definieron y justificaron escrupulosamente su descripción del mundo del trabajo como un mundo de empresarios. La solución consistía en definirlos como jefes de negocios, por muy pequeño que fuera su negocio.

Las definiciones de la Estadística negaron la identificación de clase.

No había ningún tipo de conflicto en estas descripciones. El conflicto era descrito como un aspecto no natural de los reajustes del sistema, y sus causas eran ajenas a este. La economía de París era un mundo lleno de petites entreprises (pequeñas empresas). Los autores señalan con orgullo el arte, la ingenuidad y la competencia de estos industriels (industriales). La Estadística apelaba a la ciencia de la economía política, que además de ser su guía teórica y metodológica, era una garantía de verdad y precisión. 


II.

La Cámara tenía, por su conformación e ideología, gran influencia de la escuela liberal francesa. La Estadística era un ingrediente de la contienda contra el socialismo. 

La Estadística, por la forma en que presentaba la información, formulaba, pero no reconocía, una serie de interpretaciones alternativas a la mala situación de los trabajadores. Dichas interpretaciones eran descartadas mediante la simple afirmación de los axiomas de la economía política, que postulaban que necesariamente si había más empresarios había mejoría económica, por eso los problemas deberían estar en otro lado.

Las otras causas tenían que ver fundamentalmente con la familia, la organización "natural" en la que vivía la gente.

Por ejemplo, los salarios de los hombres eran más altos que los de las mujeres, porque los de éstas eran complementarias a los de los hombres. Pero si estaban solas tenían dificultades, pero era por estar solas. Si estuvieran casadas no tendrían ese problema, ergo, la familia es el eje.

El problema era más bien que demasiadas mujeres tenían la desgracia de vivir fuera de su marco natural -la familia- el cual era, en realidad, el único contexto económicamente viable para todos los trabajadores, tanto mujeres como hombres.

Esta interpretación disolvía la línea de separación entre la familia y el lugar de trabajo; el arden de uno construía el arden de la otra, conduciendo a una mejora (personal) del trabajador y este se convertía en empresario.

Inclusive se alababa la relación y supervisión patronal, porque en ausencia de ella, el informe decía que estos trabajadores, al no tener patrones que cuidaran de ellos ni padres que los formaran y supervisaran, tenían una inclinación a la mala conducta, a la promiscuidad y, en el caso de las mujeres, a la prostitución.

Así, los defensores del libre comercio y de la libertad individual hacían caso de la disciplina y del control. Pero a diferencia de los socialistas, a quienes atacaron por querer regular la economía, Horace Say y sus colaboradores no pretendían imponer leyes artificiales sobre lo que ellos denominaban los fenómenos naturales. En vez de eso, atribuían una función reguladora natural a la familia, cuya existencia y bienestar debían ser promovidos por el Estado.


III.

La Estadística también presentaba un argumento político, bajo la forma velada de una discusión sobre el desorden sexual. El argumento se basaba en la invocación de una "realidad" peligrosa y desordenada que entraba en competencia y amenazaba a la realidad que los autores aprobaban. La introducción de la "realidad" segunda y antitética dejaba clara la necesidad de aceptar el anteproyecto económico de los autores. Para nosotros, esta también cuestiona el estatus del documento como descripción científica objetiva.

Según el informe, podían encontrarse hombres y mujeres tanto en las categorías buenas como en las malas, y a menudo presentaban rasgos similares en los mismos oficios. Y aun en su retrato de la familia y de la moralidad, los autores trataban los temas de la sexualidad no controlada de las mujeres, utilizando la imagen de la prostituta para conjurar las visiones de un mundo (de una clase obrera) peligroso y fuera de control.

Como una mujer, una patrona (mujer) responsable se hace cargo de sus jóvenes empleadas y protege a aquellas que tienen reputación o hábitos de "virtud ligera". Las mujeres casadas que están a la cabeza de una empresa (cosiendo vestidos o vendiendo comida) en su ámbito familiar tenían dotes de mando y aptitudes comerciales. Como trabajadoras, incluso eran más fiables cuando estaban casadas, por haber aceptado, bajo el poder y protección del marido "la ley natural" de su propia dependencia.

Las mujeres que vivían fuera de la familia vivían fuera de la ley, y esto acarreaba peores consecuencias para algunas más que para otras.

La palabra "dudosa" (douteuse) recurría a referencias sobre la conducta de las obreras solteras; y no sólo implicaba un juicio negativo acerca del comportamiento dudoso de estas, sino también un sentido de duplicidad y engaño. Los investigadores no podían estar nunca seguros de lo que estas mujeres hacían realmente; las apariencias podían ser imprecisas y los títulos que designaban las ocupaciones podían ser un ardid.


IV. 

En los años que siguieron al diseño y publicación de la Estadística, las tenaces leyes de censura del Segundo Imperio y los cuidadosos informantes de la policía previnieron de la aparición de otras versiones alternativas de la realidad del mundo laboral.

Es mediante los términos políticos de poder y conocimiento como mejor podemos evaluar, los usos de la Estadística de la industria de 1847-1848 para la investigación histórica. Cuando los usos administrativos y polémicos de la Estadística hubieron pasado de moda, los historiadores que buscaban datos irreprochables tomaron el informe por su valor nominal y lo incorporaron a su documentación sin cuestionarse sus categorías ni interpretaciones. 


Braudel. Las Montañas.

Braudel, Fernand. “Prólogo a la primera edición francesa”, “Montañas, civilizaciones y religiones”, “La libertad montañesa”. En El Mediterráneo y el mundo mediterráneo en la época de Felipe II, I:12-20, 40-50. México: FCE, 1987. [fecha original de la obra: 1949]

Prólogo

El Mediterráneo del historiador no es un personaje nítido y definido. Más que un mar es un complejo de mares. Delimitar es definir, analizar, reconstruir, y cuando haga falta elegir, adoptar una filosofía de la historia.

Los estudios de todas las disciplinas hablan de fragmentos de ese mar.

Pero sabe que su aporte será parcial y será revisado, discutido y desplazado. Así progresa la historia.

Captar esta historia es ponerse a la sombra de aquellos trabajadores que se esforzaban por elevar la historia económica y social en Francia.

Se divide en tres partes, una de la historia casi inmóvil del hombre con el medio que le rodea, otra la lenta que es una historia social, de los grupos y agrupaciones (las economías, los Estados, las sociedades y civilizaciones). Y la tercera, la de los acontecimientos, de oscilaciones breves, rápidas y nerviosas.

En contra de Ranke o de Karl Brandi, la historia-relato no es un método o no es el método objetivo por excelencia sino que es también una filosofía de la historia.


P. 40. Montañas, civilizaciones y religiones

La historia de la montaña es no tenerla, estar al margen de la civilización.

Ejemplo los berberes parapetados en sus montañas al norte de África.

Es zona de disidencia.

La civilización tiene un valor poco seguro.

Hay un rezago y una credulidad primitiva: Las montañas son el refugio por excelencia de estas culturas aberrantes, surgidas de la noche de los tiempos, que persistirán aún después del Renacimiento y la Reforma.

Inclusive el régimen feudal llegó a las montañas de forma incompleta.

La montaña es un obstáculo, una barrera, pero al mismo tiempo un refugio, un país para hombres libres. 


El campesino Bodo

Power, Eileen. “El campesino Bodo. Cómo se vivía en un fundo campesino en tiempos de Carlomagno”. En Gente de la Edad Media, 11-28. Buenos Aires: Eudeba, 1994 [fecha original de la obra: 1924].


Bodo ejemplifica la vida campesina y una fase simple de una propiedad rural típica en época de Carlomagno (800-814)

Hablar de la gente común hubiera sido rebajar la dignidad de la historia.

Carlyle fue una voz clamando en el desierto para conocer  “la Vida del Hombre en Inglaterra: lo que los hombres hicieron, pensaron, sufrieron y gozaron”.

El presente libro se ocupa sobre todo de las cocinas en la Historia, y lo que visitaremos en primer lugar es una finca de campo a comienzos del siglo ix.

La principal fuente de información, empero, es un maravilloso catastro que redactó Irminon, abad de Saint- Germain des Prés, en las inmediaciones de París, para que los miembros de la abadía supieran exасtamente qué tierras pertenecían a la comunidad y quiénes las habitaban. 

En el catastro de Irminon se consigna el nombre de cada fundo (o fisc como lo llamaban) perteneciente a la abadía, con la descripción tanto de las tierras cuyo aprovechamiento vigilaba el administrador de la comunidad religiosa en beneficio de ésta, como de las que eran ocupadas por arrendatarios; figuraban en dicho catastro los nombres de esos arrendatarios y los de sus esposas e hijos, así como también los servicios y arrendamientos exactos-sin excluir del cálculo ní un tablón ni un huevo- que debían pagar por sus tierras.

cada fisc se dividía en tierras señoriales y tierras tributarias. Estas tierras tributarias se dividían en muchas alquerías pequeñas Ilamadas mansos, ocupadas por una o más familias. Además había mansos pequeños dependientes ocupados por personas con diversos grados de libertad, aunque todos debían trabajar la tierra del señor mansorial.

La relación a veces implicaba trabajo semanal (arar una determinada porción o tiempo) y trabajo de favor (corvée), no pagado en las tierras de los monjes (labores manuales).

Había además que pagar tributos a la casa grande, tributo que Carlomagno exigía a la abadía y esta a sus arrendatarios.

Además debían pagar tributos en objetos (pollos, huevos, tablones de madera, etc.) y si era artesano, productos de su oficio.

Todo se entregaba al administrador (intendente, villicus o major), quien además de supervisar, debía hacer un informe al abad. Tenía un manso propio que debía estar más al día que otros para dar el ejemplo, pero como no podía cultivarlo pues no le quedaba tiempo, tenía subordinados llamados deans

Vivía ahí un hombre llamado Bodo, casado con Ermentrude y tres hijos Wido, Gerbert e Hildegard.

(Desarrolla aquí un día imaginario, basado en los elementos anteriores, con episodios en que se mezcla la fe cristiana con tradiciones populares).

miércoles, 18 de junio de 2025

China: El primer Imperio

Botton, Flora. "El Primer Imperio" en: China, su historia y su cultura hasta 1800., pp.98-177

Qin (221-207 a.C.)

El rey Zheng de Qin dominó sobre todos los demás y aunque hubo fragmentación y a veces la unificación era más un deseo que una realidad, puso las bases de la unificación que persiste hasta hoy. Legalista (partidario de un poder fuerte y efectivo sostenido por leyes severas y precisas) fundó dinastía, se llamó en vez de wang (rey), huangdi (emperador) y para reafirmar continuidad fue el Shi Huangdi (primer emperador).

Dividió territorio en 36 comandancias (jun), cada una dividida en prefecturas (xian).

Los confucianos lo califican de megalómano, violento, vengativo y supersticioso.

Promovió la centralización del gobierno, no entregó tierras a la aristocracia lo que dio un golpe mortal al feudalismo. Obligó el traslado a cercanías de 12.000 familias nobles, eliminó títulos nobiliarios, unificó pesas y medidas y la escritura li, apta para pincel y que perdura hasta hoy.

Inicia la Gran Muralla en 214 a.C., aunque hay dudas de finalidad ya que fue penetrada múltiples veces, podría ser para mantener activo el ejército.

Hizo expediciones al sur fundando Guangzhou (cantón), Hanoi (en Vietnam) y Fuzhou (en Fujian).

Era antiintelectualista y mandó quemar todos los libros salvo medicina, agricultura y adivinación. Permitió adquirir tierra a campesinos pero los altos impuestos los hacían endeudarse y volver al estado anterior supeditados a los nobles.

La nobleza lo adversaba y el reino de Chu nunca lo aceptó.

Fue destronado en 207 a.C., por un ejército liderado por Xian Yu (noble de Chu) y Liu Bang (campesino de Shengdong), imponiéndose este último como emperador en 202 a.C.

Han (206-a.C. - 220 d.C.)

El periodo se divide en tres etapas: Han Occidental, con su capital en Chang'an (actual Xi'an; 206 a.C-8 d.C); la época intermedia, en la cual tomó el poder el usurpador Wang Mang (9-23 d.C), y Han Oriental, con la capital en Loyang (25-220 d.C).

Aunque duró cuatro siglos marcó la historia china. 


HAN OCCDIENTAL

Se le dio a Liu Bang el nombre póstumo de Han Gaozu, rey de los Han. Buscó buenos consejeros y le dio más importancia a estos y a los administradores, descansando en ellos la iniciativa de las decisiones, que ejecutaría o no el emperador. Repartió tierras entre leales y amigos lo que creó un doble sistema:  en el este feudalismo y en el oeste los jun y xian bajo el mando de burócratas. 

Tanto Gaozu como su sucesor Wendi (179-157 a.C.) eran anti intelectualistas y legalistas. Al morir Gaozu toma rienda su mujer emperatriz Lü. ya para ese momento solo quedaban 15 jun bajo el control del gobierno central. 

Cuando el sucesor Wudi (141-87 a.C.) toma el poder el reino era próspero y el poder del emperador estaba consolidado. Acabó con el sistema fengjian, expandió el comercio a zonas remotas e inició tributos y la ruta de la seda. Instaura el confucianismo como doctrina oficial. 

Durante el imperio Han se favoreció dedicarse a la agricultura con impuestos bajos, se abrieron nuevas tierras y se trabajaron técnicas de mayor productividad. Hubo mercancías como tejidos, cerdas, encurtidos y calzado que se vendían en mercados, pero lso más atractivos como hierro, vino, sal y el usufructo de bosques y ríos siguió siendo monopolio del gobierno central.

Estableció un aparato administrativo que duró 2.000 años. Era “hijo” del Cielo y su mandato era revocable. Contaba con un canciller responsable de finanzas y presupuesto. Luego secretario imperial que supervisaba oficiales. Además el tercer consejero era el gran comandante que se encargaba de asuntos militares. Había además nueve Ministros. El problema era que había grupos de poder alrededor de los Ministros. 

Había Conferencias de la Corte que discutían problemas serios.


WANG MANG Y LA CORTA DINASTÍA XIN (9 -23 d.C.)

El Antiguo Ministro de la Emperatriz Viuda toma el poder. Nacionalizó tierras, impuso límites a la tenencia, tratando de restaurar el sistema jingtian (Chinese land redistribution method existing between the eleventh or tenth century BCE (Western Zhou dynasty) to around the Warring States period. Though Mencius describes examples from the Xia and Shang dynasties, these could be mythological or imagined, and credited King Wen of Zhou as one of the persons enacting the system. The name comes from Chinese character 井 (jǐng), which means 'well' and looks like the # symbol; this character represents the theoretical appearance of land division: a square area of land was divided into nine identically sized sections; the eight outer sections (私田; sītián) were privately cultivated by farmers, or nong in Chinese, one of the occupations of the four occupations system; and the center section (公田; gōngtián) was communally cultivated on behalf of the government, or in some cases, the landowning aristocrat or duke.) Creó graneros para evitar la especulación.

Los encargados de aplicar esas medidas eran de la clase afectada por lo que hubo ineficiencia y corrupción.

Miembros de la familia Liu (imperial) organizados como los cejas rojas, vencieron y lo depusieron en 23 d.C., pero hubo luchas de sucesión y en 25 d.C., Liu Xiu sometió a los cejas rojas y se impuso.

Recibió el nombre póstumo de emperador Guangwu. Era un aristócrata con muchas tierras e intereses comerciales e inicia el Han Oriental.


HAN ORIENTAL (25 - 220 d.C.)

Guangwu era representante de las familias a las que quiso desempoderar el imperio Han. favoreció los clanes y el confucianismo.

Hubo escasez de mano de obra. Para tratar de paliar eso se eliminaron milicias pero eso volvió inestables y vulnerables los territorios del norte y oeste. En su sur por la masiva migración se dieron latifundios con esclavos. Esos terratenientes se volvieron muy poderosos. 

Por otra parte, en la Corte los eunucos fueron ganando poder y luchaban contra los familiares del emperador y contra los intelectuales.

Hacia la mitad del siglo II se suman además rebeliones populares con influencia religiosa de daoísmo. Grupos como los de los turbante amarillos, iniciados por Zhang Jiao, su patriarca. En 184 tenían ya 360.000 miembros.

Se cuestiona si era un movimiento campesino o si más bien buscaba cambiar de gobierno pero no de sistema.

Se suman las contiendas entre generales y magnates locales que crecieron en poder durante las rebeliones de los turbantes amarillos.

China estuvo en manos de caudillos hasta que fue consolidándose el poder en Cao Cao, un caudillo del norte, que creó una clase militar hereditaria (shijia). No logró reunificar el imperio y se pasó al período de los “Tres Reinos”.


CHINA Y EL MUNDO

Es un error común afirmar que China vivió aislada. Tuvo contactos frecuentes y difíciles con sus vecinos del norte y del sur, a quienes llamaron bárbaros ( como los griegos a sus rivales asiáticos y los romanos a sus invasores germanos). Pero sí había una gran diferencia: China era una civilización sedentaria y de ciudades, sus vecinos, nómadas. Hubo relación apaciguadora con regalos y matrimonios y a veces enfrentamientos.

Influyó el sistema tributario chino:  El sistem a tributario es una extensión universal de la estructura social confuciana en la cual las cinco relaciones básicas son de soberano a súbdito, de Padre a hijo, de marido a mujer, de hermano mayor a hermano menor y de amigo a amigo, lo que explica la forma en la que funcionaba lo que Occidente llamó la “familia confuciana de naciones”.

Con los xiongnu (pueblos de mongolia) hubo una relación difícil. Se les fue expulsando hacia el norte y oeste (Guansu).

A partir del reino de Wudi empezó la penetración China en Asia Central, por motivos de expansión económica, para vender seda en el Mediterráneo (una ruta por Partia y otra más al norte por Ili - actual Rusia) y para limitar el poder de los nómadas del norte. 

El confucianismo (con su sincretismo) se convirtió en doctrina oficial con su balance entre el yin y el yan.

Hubo discusión entre el Nuevo texto que consideraban a Confucio como un rey sin trono, mesías y dios; el Viejo Texto lo consideraban un sabio y maestro pero humano. El daoísmo también influyó en prácticas sexuales y dieta, así como el desarrollo de la alquimia buscando la inmortalidad.

En Han hubo una gran proliferación de libros. Se hace libro de Sima Qian (135-93 a.C), el Shiji (Crónica del historiador) y el Han Shu (Historia de Han), y fue iniciada por Ban Biao, escrita en gran parte por su hijo Ban Gu y terminada por su hija Ban Zhao. Fue desarrollado el fu, "poema en prosa" o, mejor dicho, poema de rima irregular en el que se usa un lenguaje muy florido y en el que predominan descripciones de paisajes, ciudades y personajes.

En el arte, el realismo era una de las características principales del arte Han.

Una de las principales contribuciones de la época Han fue la invención del papel en el primer siglo de nuestra era. Crearon la porcelana (es un tipo de cerámica, generalmente blanca, fina y translúcida, conocida por su durabilidad y resistencia al calor y a los arañazos). Usaron la astronomía (eclipses) con motivos políticos. Desarrollaron técnicas de conservación de los cadáveres.


LA SOCIEDAD

Los campesinos vivían muy limitados. Si no estaban sujetos a un terrateniente y eran libres, las cargas fiscales en tiempo de guerra los hacían perder tierras y volverse dependientes. Estos terratenientes acumularon mucho poder. Wu confiscó tierras, ejecutó terratenientes y los supervisaba, pero siempre fueron un elemento desestabilizador.

A fines del siglo II a.C., el Imperio tenía unos 60 millones de habitantes y la burocracia necesaria para su gobierno eran unos 130.000 burócratas. Wu estableció una universidad donde estudiaban los libros clásicos confucianos. El Emperador debía siempre contar con el beneplácito del Cielo para mantenerse gobernando.

Hubo pocos comerciantes por el estigma confuciano del parásito. Preferían ser terratenientes. Además, había monopolios y hostigamiento a los comerciantes así como la corrupción de estos a los burócratas para sobrevivir.

Hubo esclavos pero había mucha mano de obra por lo que no era fácil la diferencia económica entre esclavos y campesinos libres.

No hay un desarrollo netamente feudal, sino coincidencia entre burócratas y terratenientes. 

Al igual que durante la época Zhou la vida social era muy diferente según la clase y se refleja en los objetos funerarios. Las familias eran pequeñas (5 o 6 miembros en total) y la propiedad se dividía entre hijos, lo cual se prohibió luego. El matrimonio era algo de familia y los padres, no del gusto de los individuos. El divoercio era iniciativa principalmente del hombre por desobediencia a los suegros, esterilidad, adulterio, celos, enfermedad incurable, habladuría y robo. Aunque hubo casos de mujeres divorciadas y vueltas a casar.Tanto en las clases privilegiadas como en las populares la mujer era un bien familiar enajenable. Los ricos y poderosos usaban a sus hijas para efectuar alianzas y las entregaban aun a los "bárbaros" más temibles si así les convenía, o las ofrecían como concubinas en harenes de reyes y príncipes. Los pobres las vendían a otras familias como esclavas o a proxenetas como prostitutas. Dentro de la familia la mujer debía mostrar humildad y obediencia y siempre era inferior al hombre.

En la historia de Han hay casos de mujeres destacadas por su poder o por su educación. Ban Zhao, historiadora destacada, pero también autora del libro Nujie (Lecciones para las mujeres) en donde señala claramente la obligación de la mujer de aceptar su posición inferior, y Cai Yan (Cai Wenji), mujer culta y apreciada por Cao Cao que pudo ordenar y reconstruir la obra literaria de su padre, Cai Yong.


La fragmentación del Imperio (220-589)

La caída de la dinastía Han inicia una época de división en varios estados, algunos efímeros y otros que dominaron hasta volver a un imperio centralizado. No fue tanto que “bárbaros” que de todos modos eran pueblos periféricos más o menos integrados, causaron la caída de la dinastía sino que aprovecharon el vacío.

Este periodo histórico se divide de la siguiente manera: 1) Los Tres Reinos, 2) La dinastía Jin, 3) Los Estados del Norte y del Sur; es decir, "Los Dieciséis Estados de los Cinco Bárbaros" (en el norte) y "Las Seis Dinastías" (en el sur).


LOS TRES REINOS (220-280)

Surgieron tres reinos, Wei, Wu y Shu-Han, aunque Wei era mucho más poderoso en lo militar y político. Se desarrolló más el sur y el sudeste económicamente. En Wei, se establecieron colonias agrícolas al estilo de Cao Cao, pero al morir éste su hijo Cao Pei cedió poder a las familias poderosas que impusieron la ideología confuciana y acabar con la reformas agrarias y volvieron a latifundios.

En Wu, escaseaba la mano de obra, y aunque desarrolló comercio con los reinos marítimos del sur, era vulnerable frente a Wei.

En Shu-Han, Liu Bei (161-223) ocupó el trono pero el más importante fue Zhuge Liang (181-234), de sabiduría mítica que mediante el legalismo y las colonias agrícolas controló a la aristocracia, pero que al morir, tomaron el poder los aristócratas de Hubei y Hunan.


JIN OCCIDENTAL (266-316)

En 263, los Sima vencieron a Shu-Han y en 265, Sima Yan, nieto de Sima Yi, destronó a la dinastía Wei y estableció la dinastía Jin. En 280 cayó Wu y durante algunos años China volvió a estar bajo el mando de un solo soberano. Se volvió a la gran tenencia de tierra para su administración y tributos, y para que aportaran ejércitos.


LOS DIECISÉIS ESTADOS DE LOS CINCO BÁRBAROS (301-439)

En el norte hubo múltiples estados, dominados por pueblos no chinos.


Algunos eran nómadas asentados parcialmente (como los xiongnu). Fundaron reinos con apellidos del pasado Han. Otros eran los jie, de Asia Central y los xianbei. Posiblemente eran turcos o mongoles. Los qiang y los di estaban emparentados con los tibetanos. El que más duró fue el de los toba (rama de los xianbei) que duró 150 años.

La emperatriz viuda, Wenming entre 484 y 486 implementó el sistema juntian (parcela igual), dando una misma cantidad de tierra a cada uno y que tributara al Estado de por vida, para evitar terratenientes, pero no funcionó. Fue retomado por los Siu y Tang luego y fue la base de la afirmación del poder del Estado. Los toba alentaron las costumbres chinas y el budismo. Hubo ineficiencia, corrupción, descontento de soldados, opresión de campesinos y elementos antichinos, todo derivando en guerras.

Yang Jian, usurpó el trono y fundó la dinastía Sui poniendo así fin a la dominación de los pueblos no chinos, pero no a la amalgama cultural que se había producido. 


LAS SEIS DINASTÍAS DEL SUR (317-589) 

En el sur las condiciones eran muy diferentes y durante casi tres siglos no hubo divisiones sino una sucesión de casas gobernantes. Existía la vieja aristocracia local, celosa de sus privilegios y, en segundo término, la aristocracia emigrada del norte. Pronto se vio que era necesario llegar a un compromiso con la aristocracia local.

Liu Yu, a quien algunos historiadores comparan con Cao Cao, trató de reducir el poder de los aristócratas pero no lo logró; es más, durante el reino Song se institucionalizó el privilegio de los aristócratas, se hicieron genealogías de cada familia y se prohibieron los matrimonios entre aristócratas (shi) y plebeyos (shu). Así se fomentó la perpetuación de una clase endógama que pronto habría de mostrar señales de degeneración física y mental.

La preocupación del sur se había volcado totalmente hacia la defensa y de ninguna manera les interesaba la reconquista del norte.


LA CULTURA

Este período de inestabilidad política no es sinónimo de vacío cultural. 

La filosofía política y social se descuidó en aras de un individualismo casi insólito y la búsqueda filosófica se volcó más hacia la metafísica. Los intelectuales perdieron su rol director. El ejemplo más típico de esta clase de intelectuales es el de "los siete sabios del bosque de bambú", grupo heterogéneo de siete alegres amigos que vivieron en el siglo III, que trataron de mantenerse alejados de puestos y honores (aunque algunos capitularon al final) y se dedicaban a beber, conversar, escribir poesía y tocar instrumentos. Algunos descuidaban su apariencia y vestían sin hacer caso de las convenciones de la época. 

A la vez que el daoísmo puramente filosófico se desarrollaba por el lado de la metafísica, el daoísmo xian, de características religiosas, seguía también su camino. En el siglo iv aparece el Baopuzi de Ge Hong, una enciclopedia que mencionaba las técnicas para prolongar la vida (por medio de ejercicios, de medicinas, dietas, respiración, etc.). También ofrece fórmulas para producir el elíxir de la inmortalidad, que convierte al ser humano en xian (inmortal). Este daoísmo se volvió muy popular entre las clases altas y aun en la corte. En el sur tuvo que luchar contra cultos indígenas y supersticiones locales. 

El budismo penetró en China por Asia Central por conducto de comerciantes que llegaban por las rutas de la seda, aunque es muy opuesto a la mentalidad china: sufrimiento vs placeres, celibato vs hijos, mendicidad vs trabajo, monasterio vs sociedad y obediencia al Estado. Sin embargo, el auge se produjo en la época de desunión y desconcierto. Los monasterios además cumplían función social de refugio. Los monasterios budistas sirvieron como hoteles para viajeros y centros educativos para jóvenes sin recursos. Otras funciones que cumplían eran ofrecer servicio médico, entierros gratuitos, caridad a los necesitados.

En el norte el budismo creció por apoyo de soberanos, en el sur por aristócratas y letrados. Al inicio se confundió con el daoísmo, pero al verse diferencias entraron en pugna.

Hubo insatisfacción con las traducciones y el monje Fa Xian fue a la India a través de Asia Central en 399 y regresó en 414 cargado de textos. Parte del canon budista ha llegado hasta nuestros días gracias a traducciones chinas.

Se diseminaron varias sectas como la chan (zen, en japonés) que pone énfasis en la meditación y la introspección.

La poesía tuvo una gran importancia, más romántica por influencia del daoísmo, alabando la vida sencilla, los placeres, y la brevedad de nuestro paso por la Tierra.

Poesía lírica como la de Xie Lingyun (385 - 433) y Tao Qian (Tao Yuanming; 365-427).

En el norte, influido por libertad de las costumbres tribales surgen leyendas como la de Mu Lan. Aparece la crítica y recopilación literaria.

La influencia del budismo sobre la literatura fue enorme: historias de la vida del Buda y otros personajes.

Se desarrolló la escritura, a veces monumental. Las esculturas reflejan influencia grecorromana en vestimenta.

Los toba construyeron monasterios y en Gansu estatuas y frescos de Buda.

Aparece pintura paisajista.

La situación de la mujer varía poco. En cuanto a la familia, en el norte era generalmente monógama y varias generaciones vivían bajo el mismo techo. En el sur, las familias eran nucleares, las mujeres estaban recluidas y la poligamia era más frecuente.

Aunque el budismo tiene su misoginia, promueve más igualdad, pero la moral confuciana impuso por ejemplo que en vez de hablar de amor entre esposo y esposa, se hablara de obediencia y reverencia hacia el esposo.