Liverani, Mario. Liverani, Mario. “Los Medos y la Unificación Persa” en: El antiguo oriente. Historia, sociedad y economía… p. 700-719.
1.- Los pueblos iranios desde las migraciones hasta la época asiria
Hacia 1800 a.C. centros urbanos abandonados, reconversión a aldeas y economía pastoril.
Una primera oleada de protoindoarianos llegó al suroeste de Irán, con los nombres de Maryannu y Mitanni.
Hacia finales del s. IX, los asirios entran en contacto con pueblos iranios (principalmente para los asirios: los medos) en los Zagros, que son la segunda oleada.
Se identifican varias naciones (entidades unitarias por motivos lingüísticos, religiosos y gentilicios), formada por tribus. Los principales: medos al pie de los Zagros septentrionales, persas en el antiguo Anshan, partos al este del Caspio, bactrianos y sogdianos al norte del Hindukush, arios, dragianos y aracosios en el Irán central.
A la economía agropastoral entre 1300 y 600 a.C., se une ganado vacuno, lanar, equino y camello “bactriano”, que se une al dromedario árabe.
Se desarrollan nuevos sistemas de irrigación que favorece la incorporación de nuevas tierras. El caballo sin carro proporciona superioridad en batalla. La sociedad está dividida en una ideología tripartita: sacerdotes, guerreros y campesinos. Se impone una nueva ideología religiosa dual, entre Ahura Mazda y un antidios personificando el mal, que se atribuye a Zoroastro, (de dudosa existencia) y recopiladas en su libro Avesta. Se data tradicionalmente cerca del 600 a.C., y se convierte en la religión oficial de soberanos aqueménidas en 550 a.C.
2. El reino de media: formación y expansión
Formaciones estatales periféricas al Imperio Asirio, como los manneos (ciudad de Hassanlu, NO Irán) y los medos estuvieron sometidas a la influencia asiria y avanzaron de estados tribales a estructuras políticas más sólidas. Hubo avanzadas e invasiones asirias a esas zonas, y llevaron estructuras administrativas.
Hubo otros dos polos además: la nación Pérsida (Anshan o Anzan) aplastada por la preponderancia elamita hasta la destrucción de Susa por Asurbanipal y el otro es la nación Bactriana.
Para los asirios, los medos son un pueblo lejano y dividido. Kashtaritu/Faortes, rey de los medos, une medos, manneos y cimerios y somete a los persas. En 614 con Ciaxares se hace alianza con Nubocodonossor de Babilonia. Ciro I de Persia, entró en contacto con los babilonios, para distanciarse de los medos. La muerte de Ciro I marca el final de la expansión meda y quedaron alianzas que permitieron 30 años de paz en Oriente Próximo. Los medos controlan muchas zonas pero ninguna urbana sino los terrenos despoblados y tienen una escasa cohesión política, dos razones por las que no hay características imperiales. Ciro II de Persia, entre 553 y 550 a.C.), rebela a los persas del dominio medo y pasan a ser dominadores.
3. Los persas y la unificación de Oriente Próximo.
La coexistencia pacífica de medos, babilonios, lidios y egipcios fue interrumpida por los persas (Imperio aqueménida, primero y más extenso imperio persa) que dominaron sobre Astiages, sucesor de Ciaxares, apoyado por la estructura de dominación que ejercieron en Elam. Enfrentó a los lidios en 547 y se anexionó Lidia (Anatolia ocidental).
El noroeste seguía inseguro sin embargo. Con la sumisión bactriana (Afganistán) logró avanzar hasta el Indo. La tercera etapa fue Babilonia en 539 a.C. Los trelles vencidos eran perdonados, las ciudades no se destruían y se mantenían los cultos locales. Su hijo Cambises se anexionó Egipto y Chipre en 525. Luego Tracia y las Islas del Egeo (492-449). Se unifica desde las tierras bajas siromesopotámicas hasta las altas armenias y anatolias. Se plantea de otra forma el contraste entre palacio y tribu: ya no es un contraste étnico y regional sino una mezcla de componentes urbanos y montañeses. Los palacios aqueménidas como Persépolis, son construidos con materiales de todas las partes del mundo, cada pueblo contribuye con lo mejor que tiene. La principal capital fue Susa aunque hay traslados.
Hay un componente nómada y guerrero pujante en la tradición de la realeza irania. Dada la extensión del Imperio, el problema lingüístico pasa a primer plano. Las inscripciones suelen ser en babilonio, elamita y persa, a veces añadiendo egipcio. La administración de cada región usa su propia lengua. El arameo se impone como lengua franca, aunque el persa (farsi) se difunde. Darío es el artífice de la organización administrativa, dividida en veinte satrapías desiguales, lo que se refleja en la recolección de tributos, de los cuales solo Persia se exime. Hay difusión de una moneda única: el dárico de plata y de oro. Con el tiempo, acuñación en satrapías se sumará. Se organiza en transporte con calzadas reales (aquí), lugares de descanso y cambio de caballos, un sistema postal, y rutas marítimas que unieron el Mar Mediterráneo, el Rojo y el Golfo Pérsico.
4. La nueva formulación de la Ideología Imperial
La continuidad entre la ideología y la organización del reino de Media y el del persa de darío debió ser considerable. Perduran elementos propiamente iranios: el guerrero, el gentilicio (orgullo de pertenecer a un clan superior) y el ético (exteriores son enemigos y lucha el bien contra el mal).
El modelo asirio-babilonio aporta el título real (Ciro, rey de la totalidad), aparato cortesano, de gobierno central y provincial, sistema tributario y organización militar. Les gustaba presentarse como herederos directos y restauradores de las realezas locales, frente a sus degenerados y justamente depuestos representantes anteriores.
Es un Imperio por absorción, no por destrucción como los anteriores. Ciro es más sincrético que Darío que es más intolerante por esta idea del zoroastrismo de confrontación mal y bien.